El almuerzo de los remeros.

Títulos: El almuerzo de los remeros. 

Estilo: Pintura impresionista perteneciente a la segunda mitad del siglo XIX.

Autor: Pierre Augusto Renoir, cuando es joven trabaja como aprendiz en una fábrica de decoración de porcelanas y de aquí surge el gusto por lo decorativo y por los colores. 

Cronología: 1881.

Contexto: A finales del s.XIX se producen en Francia un periodo de paz causado por el final de la guerra francoprusiana. De esta forma se producen en la sociedad grandes cambios tanto en la burguesía como en la clase obrera, que comienza sus revoluciones. Estos cambios dan lugar al florecimiento a los inventos. 

Clasificación: Se trata de una pintura de tipo costumbrista. 

Características formales:  Es una representación banal en la que vemos el descanso de los remeros junto al río. La técnica empleada es el óleo sobre lienzo y vemos cómo la luz es la protagonista de la pintura y la manera en la que incide sobre los cuerpos. En el espacio no hay líneas y desaparecen los contornos de los dibujos, dando una sensación vibrante. Los colores más destacados son los primarios, como el azul o el amarillo, aunque también destacan los complementarios como el naranja o el verde. La pintura es una representación pintada al aire libre y el autor emplea una pincelada suelta. 

En cuanto al análisis psicológico de los personajes nos aportan alegría con sonrisas y miradas. 

Impresión sol naciente.

Título: Impresión sol naciente. 

Estilo: Pintura impresionista de la segunda mitad del siglo XIX. 

Autor: Claude Monet, nace en París y se traslada al Havre donde comienza su amor a la naturaleza y su odio a los estudios de la pintura. Además, viajó a Argelia donde se quedó impresionado por la luz y el color; y a Gran Bretaña, donde se pone en contacto con Turner y Pizarro. 

Cronología: 1872

Contexto: A finales del s. XIX se produce en Francia un periodo de paz cuasado por el final de la guerra francoprusiana. De esta forma, se producen en la sociedad grandes cambios tanto en la burguesía como en la clase obrera, que comienza sus revoluciones. Estos cambios dan lugar al florecimiento de los inventos. 

Clasificación: se trata de una pintura de tipo costumbrista. 

Características formales:  La técnica empleada es el óleo sobre lienzo, en la que el tema es un amanecer sobre un paisaje en el que se ve un lago y unos barqueros. El autor trata de captar el efecto de la luz sobre los cuerpos o la vaporosidad del agua. La obra está pintada al aire libre, por lo que la luz es la protagonista de la pintura, pues no es simbólica sino física. En el espacio no hay líneas, es decir, desaparecen los contornos de los dibujos y los cuerpos parecen flotar. 

El color es claro y en lugar de emplear el negro para las sobras, se utiliza el violeta. Los colores que predominan en la obra son el azul del cielo y del mar sobre todo, y en algunos casos podemos apreciar reflejos de color verde. También aparece el color amarillo del sol, quien da luminosidad a la pintura. Los colores se ponen uno junto al otro pero sin llegar al mezclarlos para que los pueda mezclar la retina humana. Claude Monet utiliza una pincelada ondulada para realizar sus obras.

Conclusión: Esta obra es criticada por Leroy utilizando para ello el término "impresionista". 

El Juramento de los Horacios.

Título: El juramento de los Horacios. 

Estilo: Pintura neoclásica.

Cronología: 1784. 

Autor: El autor es Louis David, pintor político que se compromete con los ideales de la Revolución Francesa y con el imperio napoleónico. Se formó en el arte grecorromano y en la pintura de Caravaggio y Rafael. 

Contexto: A partir de una crítica al Antiguo Régimen se genera la filosofía de la Ilustración, basada en la naturaleza, la razón y el hambre. De esta manera, surge un nuevo concepto del mundo, que se basa en la igualdad y libertad que provoca la caída del Antiguo Régimen.

Clasificación: Se trata de una pintura de tipo político. 

Características formales: 

Se trata de una representación política, en la que se representa la historia de los Horacios de Roma. Son tres hijos que hacen un juramento ante su padre, de morir antes de ser vencidos en su batalla contra los curiaceos. La mujer que se encuentra en el centro es de la familia de los Curiaceos, casada con Horacio; la de la izquierda es una hermana de los Horacios y está prometida con un Curiaceo; y la del fondo es la madre de los Horacio con dos hijos. La técnica empleada es el óleo sobre lienzo. Hay un dominio del dibujo, en el que se marcan mucho los perfiles de los personajes. 

El contraste entre luces y sombras se suavizan, de modo que desaparece el tenebrismo y la perspectiva aérea, lo cuál hace que la pintura sea nítida y de total claridad. 

Podemos apreciar dos perspectivas, la primera, en la que se encuentra la acción del juramento, y la segunda, en la que se encuentran el grupo de mujeres e hijos. El volumen es concebido como escultura, y la pintura sí representa un grado de realismo. En cuanto a los pliegues de la ropa son naturales, y el cuadro da sensación de movimiento con el levantamiento de las manos. En referencia al análisis psicológico de los personajes podemos observar seriedad y fidelidad ante el juramento que han hecho. 

Conclusión:  Louis David toma como modelo las pinturas de Rafael, Tiziano y Corregio. 

El Martirio de San Felipe.

Título: El Martirio de San Felipe. 

Estilo: Obra perteneciente a la pintura barroca española, en concreto, a la escuela de Valencia.

Cronología: 1639.

Autror: José Ribera, conocido como ''Spagnoletto''. Sus obras enviadas a España, renovaron la técnica y los modelos iconográficos de los pintores locales. 

Contexto: La monarquía española es una monarquía absoluta controladora de todos los ámbitos de poder. La monarquía se resiste a aparentar debilidad política, la iglesia se sigue demostrando triunfante tras la ruptura con los protestantes y España es fiel seguidora de las contrarreformas. El control por parte de la iglesia es muy grande a través de la Inquisición. 

Clasificación: Se trata de una pintura con temática religiosa. 

Características formales: 

Es una pintura religiosa, en ella, el tema representado es la preparación para el Martirio de San Felipe. La técnica empleada se trata de óleo sobre lienzo.  El color más destacado es el rojo, pues a San Felipe se le representa con un color demasiado blanquecino y es el personaje más iluminado de toda la pintura, ya que es el protagonista. La luz es natural, característica del naturalismo tenebrista de la primera mitad del siglo XVII. Las figuras tienen un cierto volumen, la coposición se basa en las diagonales y el desnudo tiene una ciertavaloración, pues se recrea en la anatomía potente y en la piel y el rostro envejecido del santo. El autor además, se caracteriza por representar en cada una de sus pinturas unas manos rugosas y unos cuerpos deteriorados con el paso del tiempo. Los pliegues son ligeros y la disposición de los personajes aporta sensación de movimiento. En el fondo aparece una alusión a lo clásico, pasividad e indiferencia en los espectadores. 

En cuanto al análisis psicológico de los personajes, podemos ver en el santo un rostro de sufrimiento pero a la vez de aceptación, y los rostros del resto de personajes transmiten tranquilidad. 

Conclusión: José Ribera se dedica sobre todo a representar martirios. Destacan algunos como el Martirio de San Andrés, San Sebastián, San Bartolomé...